Real Madrid, campeón de Copa

El Real Madrid acabó adjudicándose el título de campeón de Copa del Rey en la final más vista de la historia de nuestro fútbol. Un gran partido en el que tanto el club blanco como el subcampeón, el Fútbol Club Barcelona, hicieron méritos para sentirse ganadores.

[caption id="" align="aligncenter" width="660" caption="El Capitán Casillas, alzando el título que le quedaba"][/caption]

La primera parte fue muy física y competida, una batalla en el centro del campo que hizo que el juego se volviese lento y trabado, típico de una final en la que se juega el prestigio y un título. La capacidad de sacrificio de Cristiano Ronaldo arriba y de Pepe en la medular ahogó el juego de toque del Barça, que se vio superado por sus propias armas: la presión incesante arriba. El Madrid, jugando rápido a la contra, estuvo a punto de anotar en un par de ocasiones, siendo la más clara un remate de Pepe de cabeza completamente solo que acabó en el travesaño de la portería culé. El Barça estaba contra las cuerdas.

[caption id="" align="aligncenter" width="412" caption="Para algunas cosas, Pepe sabe usar muy bien la cabeza"][/caption]

Sin embargo, algo cambió en la segunda parte. El Madrid salió cansado y no pudo seguir presionando tan arriba, lo que propició que el Barcelona empezara a jugar como nos tiene acostumbrados. El juego combinativo y rápido del equipo de Pep, sin embargo, no tenía la mordiente y la definición de otras noches, con un Pedro renqueante aun de su lesión y un Villa desaparecido. Sólo Messi, haciendo la guerra por su cuenta, e Iniesta con una conducción de balón exquisita dieron algún susto a la zaga madridista, pero ahí estaba el capitán blanco, el Santo Casillas, que salvó a su equipo de un nuevo iniestazo. Es la imagen del partido, junto con el gol que lo decidiría todo.

[caption id="" align="aligncenter" width="410" caption="Iker, salvando a su equipo una vez más."][/caption]

Pero ese gol no llegaría en el tiempo reglamentario. Tras el pitido del árbitro, el partido se disfrazó de película épica. Ambos bandos, cada uno en su campo, se reunieron, se abrazaron, curaron a sus heridos y alentaron a los héroes desfallecidos. Los dos generales dieron las últimas órdenes, pero poco importaba eso a los guerreros, que comenzaron a jugar la prórroga con más corazón que cabeza, quizá por el cansancio acumulado, quizá por querer vencer a su centenario rival.

[caption id="" align="aligncenter" width="402" caption="Alonso y Busquets, 120 minutos de lucha"][/caption]

Y, como buena película épica, el guión sorprendió al final. El Madrid resucitó y comenzó a acosar la portería de Pinto, hasta que, en el minuto 102 de partido, Cristiano Ronaldo se elevó por los aires y remató a puerta un espectacular centro de Di María. El Barça, herido de muerte y nervioso, no pudo devolver el golpe. Casillas fue el elegido para levantar la Copa del Rey, el título que le faltaba, bajo la atenta mirada de un Sandro Rosell que vendió la piel del oso blanco antes de cazarlo.

Al fin CR7 no desaparece en un partido grande

Como curiosidad, esta es la primera final que pierde Pep Guardiola como entrenador, mientras que es la cuarta Copa que consigue Jose Mourinho en un país diferente. De momento, el Madrid ha obtenido un título y un empate en el carrusel de Clásicos, mientras que el Barça tiene encarrilada la Liga. Próxima parada: la Champions.

[caption id="" align="aligncenter" width="440" caption="De momento, el portugués está ganando la partida en este duelo particular"][/caption]

Lo mejor del partido: Los dos equipos, fieles a su propio estilo, merecieron ganar. Ambos tuvieron una parte en la que fueron cláramente superiores al otro, pero en una final sólo puede ganar uno.

[caption id="" align="aligncenter" width="423" caption="Digno partido de todos y cada uno de los gladiadores de la final"][/caption]

Lo peor del partido: Arbitrar una final de esta índole, más que un regalo, parece un castigo. Desde el primer minuto Undiano Mallenco tuvo que lidiar con jugadores broncos, sucios, protestones... Jugadores que no representan el señorío y la historia de ambos clubes en esas acciones. Deberían de tomar ejemplo de las aficiones, las cuales se hermanaron y no protagonizaron ningún incidente, y no hacer tanto caso a las insinuaciones y provocaciones de la prensa.

[caption id="" align="aligncenter" width="434" caption="Malísima imagen entre compañeros de selección"][/caption]

La anécdota del post-partido: Que a Sergio Ramos se le escape la Copa, y esta acabe aplastada por el autobús del Real Madrid me parece el mejor final cómico que se le podía dar a esta gran superproducción.

[caption id="" align="aligncenter" width="411" caption="Si bebes copas, no conduzcas"][/caption]

Nos vemos en Twitter: @DSoria14