[/caption]Hoy, los enfermos del fútbol nos hemos levantado de la cama felices porque sigue siendo fin de semana, y porque hoy precisamente nos esperan dos auténticos partidazos en la Liga BBVA. Para informarnos de las últimas novedades hemos hecho un barrido por las principales webs de periodismo deportivo, y cuando hemos llegado a Marca nos hemos visto esto:
[caption id="" align="aligncenter" width="600" caption="La portada de la discordia"]
[/caption]Hace más de un año, cuando José Mourinho llegó al Real Madrid, directiva y medios de comunicación ensalzaron hasta la saciedad la figura como entrenador del portugués (merecida por su palmarés, también hay que decirlo), dando a entender que era el mesías todopoderoso que el club blanco necesitaba para volver a la grandeza. Esa efusividad por agrandar a Mou dio, a largo plazo, la impresión de que el nuevo mánager general del Real Madrid era intocable, y no estar de acuerdo con los métodos del portugués era no estar de acuerdo con el madridismo y su historia. O se es moudridista, o estás en contra del Madrid. Pero con el tiempo (y los éxitos del equipo rival) la euforia se fue enfriando, y el sentido común de los aficionados y el periodismo ha ido despertándose de su letargo, para descubrir que José Mourinho no era el que tenía que cambiar el Real Madrid, sino al contrario. La historia blanca no podía ser manchada a costa de ganar títulos, el fin no justifica los medios. Por desgracia, no todos han despertado y no ven la diferencia entre ser moudridista y madridista. Y para muestra, un botón:
[caption id="" align="aligncenter" width="300" caption="Encuentre las diferencias."]
[/caption]Cuando Marca criticaba duramente a Pellegrini, era madridismo. En cambio, ahora parece un complot. Sin ninguna duda, el enemigo está en casa, pero... ¿Quién es realmente el enemigo del Real Madrid? No se es peor aficionado por criticar, con cabeza y de manera constructiva, a tu equipo de toda la vida. No se es mejor aficionado por estar de acuerdo, sin contrastar las informaciones y pase lo que pase, con todas las acciones del equipo de tus amores.
[caption id="" align="aligncenter" width="464" caption="¿Qué hay de cierto en todo esto? Jamás lo sabremos..."]
[/caption]Una cosa queda clara después de ver la portada: Mourinho ha dejado de ser un personaje intocable. No entraremos en la veracidad o falsedad de la noticia, ya que eso es algo que sólo conocerán sus protagonistas, además de ser una circunstancia normal en cualquier vestuario (incluído el del Barça y su políticamente correcto Pep), sino en el gesto del diario Marca de desmarcarse por fin de la filosofía mouriñista que ellos mismos crearon. Es lo más parecido al periodismo que ha hecho este periódico en años, sea verdad, mentira, exageración o descontento. Y si el portugués es intocable para la prensa, lo será para Florentino. El presidente es el primero que debe de saber distinguir entre madridismo y moudridismo, conceptos ni exclusivos, ni excluyentes.
Nos vemos en Twitter: @DSoria14
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